- Inspiración
Se acabó lo de llenar la pared de agujeros para darles vida. Ahora los interioristas se decantan por otra opción. ¿Quieres saber cuál es?
Todos hemos llenado la pared de cuadros y espejos para decorar el ambiente, pero, ¿y si jugamos colocándolos de otro modo mucho más libre y relajado? Estamos hablando de dejarlos apoyados en la pared y encima de una superficie plana, y hasta en el mismo suelo, para crear un efecto de zona repleta decalma y buen gusto.
Se trata de una idea decorativa muy moderna que no deja marcas en la pared y que hace posible que los desplaces de un lugar a otro según cómo quieras sentir y modificar el espacio. A continuación, te dejamos unas ideas para que sepas dónde y cómo puedes poner tus cuadros y espejos descansando en el espacio y que el resultado sea un éxito.
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En un mueble bajo en el salón
Un cuadro de gran tamaño resulta perfecto para apoyarse en una extensa cómoda, banco o estante de baja estatura. En este caso, el cuadro queda perfectamente combinado con el salón, ya que se ha optado por uno que emplea el blanco y negro, además, su fondo blanquecino suma luminosidad a las paredes en tonos tierra.
Si quieres prescindir del televisor, es una idea excelente para colocar frente del sofá. En esta propuesta, el cuadro que se muestra se llamaDouble Vue, de Gao Xingjian, y está en Galería Senda.
Encima de una chimenea y con la madera presente
Si tu comedor es tan acogedor que tiene hasta una chimenea, puedes aprovechar la repisa que sobresale de ella para incluir un pequeño cuadro. Puedes optar por uno que esté enmarcado con madera en el caso de que el ambiente apueste también por los materiales naturales. Así obtendrás un conjunto combinado y estiloso con lo natural en el foco.
Sobre un mueble
En el comedor puedes aprovechar una mesa estrecha, consola o cómoda que tengas para colocar un cuadro o espejo apoyado. Para escoger el cuadro más indicado para tu estancia debes tener en cuenta elementos como su color y diseño para que combine con el resto del espacio. Como vemos, los tonos tierra y amarillos son lo que permite unificar el cuadro con la estética del comedor.
Sobre un aparador
Aunque la mayoría de veces decoramos las paredes de nuestra casa con la intención de que sea para un largo tiempo, lo cierto es que en una época en la que todo va muy rápido, es habitual que nos cansemos de todo antes que antes. Por eso apoyar los cuadros es una opción ideal para esas personas a las que les gusta cambiar su decoración. Podrás cambiar su ubicación cuando quieras y devolverles a su ubicación original si lo echas de menos.
No puede faltar un espejo afrancesado
Si los interioristas pasan de los taladros para colgar unos cuadros en paredes, lo mismo con los espejos. Esta opción ofrece un look más desenfadado e informal al espacio, ya esté colocado sobre un mueble o apoyado en el suelo. En esta propuesta ayuda a restar un poco de seriedad a un ambiente clásico y afrancesado.
Un gran cuadro a los pies de la cama
Cuando sobran los metros, las grandes obras de arta ganan la partida. Y es que son una manera minimalista, pero con mucha fuerza decorativa, de dar vida al dormitorio. En esta propuesta de Núria Selva, el cuadro se apoya sobre el suelo, consiguiendo que la pared actúe como lienzo en blanco sobre el que destaca esta expresión de color.
Sobre un cabecero de obra
Es habitual decorar la pared del cabecero con cuadros. Pero, ¿qué pasa cuando esta pared ya es original de por sí? En este dormitorio, la interiorista Pia Capdevila revistió la pared con palillería de madera, que, en cierto modo, impide colgar los cuadros. Para darle más vida, la decoradora utilizó la repisa que crea el cabecero de obra para apoyar dos cuadros que decoran y aportan personalidad.
En un estante abierto de la cocina
Ahora que se llevan los estantes abiertos en la cocina, esta superficie es idónea para incluir algunos cuadros que decoren el espacio. No tienen por qué ser grandes piezas. Puedes colocar una pareja, de distintos tamaños, pero misma gama cromática que potencie el look de la cocina. En este caso, la interioristaVirginia Gash ha elegido dos cuadros, uno con marco de madera y otro negro, que aportan calidez y modernidad a partes iguales.
En una repisa en el baño
El cuarto de baño es un espacio apto para espejos, pero también para cuadros. Puedes integrar ambas piezas en una especie de repisa o estante. Hay modelos de poco fondo ideales para poner los cuadros.Elige unos cuadros quejueguen con el diseño del resto del baño.¿Más opciones en el baño? Poner un espejo sobre la repisa que se crea cuando se empotra la cisterna del inodoro.